La directora del Centro Coordinador de Pueblos indígenas de Guelatao Oaxaca, Melina Hernández Sosa describe la importancia que ha tenido la inclusión de las mujeres en la construcción de los caminos de su tierra. Fue una labor de convencimiento de las autoridades, nos dijo, pues se pensaba que la construcción de caminos o la pavimentación era un trabajo reservado solo para los hombres.

La incorporación de las mujeres desde el programa de empleo temporal puso de manifiesto el significado de un trabajo diferenciado. En Analco por ejemplo, se dejó la tarea de recolección de piedras de río a las mujeres, pues han demostrado ser más cuidadosas y tener una sensibilidad especial para seleccionar las piedras más adecuadas. El resultado está en la belleza de estos tapetes de concreto y piedra rodada que llegan a la cabecera municipal y parecen obras de arte.

Esta experiencia nos reveló la existencia de representaciones colectivas sobre lo masculino y lo femenino, que pueden y deben superarse. Las mujeres de las comunidades oaxaqueñas nos han demostrado que pueden romper con las ideas preconcebidas de los roles que culturalmente están asignados para ellas.

Poner piedra sobre piedra a lo largo del camino ha dado a las mujeres oaxaqueñas un nuevo sentido de pertenencia. Este esfuerzo es un paso pequeño; pero contundente en la lucha por la igualdad de género.